
Lo sé, estamos en algo que forma parte de lo privado, de lo íntimo, de lo que no se ve, de lo que no se cuenta.
Para nosotros , que el australiano Matthew Mitchan gane un oro olímpico y lo celebre besando a su madre y a su novio no sería noticia pero, para todos los demás, es algo a reconocer y por lo que debe ser reconocido.

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